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viernes, 24 de septiembre de 2010

Unidad 1.- Estudio cienifico del comportamiento


INTRODUCCION

¡¡ BIENVENIDOS AL FACINANTE MUNDO DE LA PSICOLOGIA ¡¡

Estimado estudiante; tienes en tus manos una colección actualizada de textos que cubren las necesidades didácticas del Programa de Estudios Revisado y Ajustado.

Una de las necesidades del curso de Psicología I se refiere al establecimiento de los objetivos específicos de aprendizaje al inicio de cada una de las temáticas, así como la presentación de las guías de estudio al final de las mismas. Los objetivos permiten al estudiante y al profesor seguir los ejes centrales del contenido de los textos, así como enfocarse en los contenidos que mejor cubren los aprendizajes de la asignatura. Por su parte las guías de estudio plantean preguntas claves y señalan actividades individuales o de grupo, las cuales permiten repasar y reafirmar lo estudiado.

Este primer curso de Psicología, esta organizado en un eje temático, cuyos propósitos son:

  • Construir una visión panorámica, organizada y fundamentada de los enfoques teóricos y metodológicos de la psicología, de su objeto de estudio, así como de su trascendencia social.
  • Describir, de forma general, el funcionamiento integrado de los procesos psicológicos de la afectividad y la cognición.
  • Utilizar los conocimientos anteriores para ejercitar el análisis e interpretación de la dimensión psicológica de algunos sucesos de su vida cotidiana.

El eje temático, de este primer curso se llama “El estudio de los procesos mentales y el comportamiento” y lo iniciamos con un apartado que nos describe cómo el concepto y el objeto d estudio de la psicología han variado a lo largo de la historia de esta disciplina, desde los filósofos griegos clásicos hasta nuestra época. También se describe el desarrollo de la psicología desde la antigüedad hasta su consolidación como ciencia, destacando las aportaciones de los protagonistas más importantes, lo que dio lugar a la aparición de diversos enfoques teóricos, tales como el conductismo, el cognoscitivo, el sistemático, el transpersonal, el psicoanálisis, el humanismo y otros más.

Enseguida se estudian los métodos más empleados actualmente por la psicología, a saber: experimental, narrativa, encuestas, estudio de caso, participación-acción y otros; los cuales derivaron a su vez de los enfoques teóricos revisados en la primera parte de esta unidad, haciendo énfasis en el proceso lógico de la investigación en psicología,

En la parte final de este eje temático se estudian los procesos básicos de la psicología de una manera integrada. Así veremos como el aprendizaje, la percepción, la memoria, el pensamiento, el lenguaje, la emoción y la motivación interactúan constantemente unos con otros al manifestarse cualquier comportamiento. También la importancia del sustrato fisiológico de todos estos procesos.



Antecedentes Históricos de la Psicología

 Propósitos:

-Construir una visión panorámica, organizada y fundamentada de los enfoque teóricos y metodológicos de la psicología de su objeto de estudio, así como de su trascendencia social.
-Describir, de forma general, el funcionamiento integrado de los procesos psicológicos, de la afectividad y la cognición.
-Utilizar los conocimientos anteriores para ejercitar el análisis e interpretación de la dimensión  de algunos sucesos de su vida cotidiana

 Contenidos:

-Antecedentes históricos y campos de aplicación de la psicología
-La investigación en psicología. Métodos y técnicas.
-Procesos psicológicos: La cognición y la afectividad

Enfoques Psicológicos

Enfoque biológico
Enfoque psicodinámico
Enfoque cognoscitivo
Enfoque conductista
Enfoque humanista-existencial
Enfoque sistemático
Enfoque transpersonal
Enfoque social de la liberación
Enfoque constructivista

ANTECEDENTES HISTÓRICOS Y CAMPOS DE APLICACIÓN DE LA PSICOLOGÍA

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

1.Señalar la importancia de las aportaciones filosóficas griegas en el estudio de los fenómenos psicológicos.
2.Describir el desarrollo de la psicología a través de los distintos enfoques teóricos.
3.Explicar las diferentes áreas y escenarios de aplicación de la psicología.
4.Formular la definición de psicología como disciplina científica.

CONTENIDOS TEMÁTICOS:

1.Antecedentes históricos de la psicología.
2.Enfoques teóricos de la psicología.
3.Áreas y escenarios de aplicación.



ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA PSICOLOGÍA.
Gregorio Campos Huichán

Para una mejor comprensión de la psicología actual, haremos un breve recorrido por sus orígenes filosóficos.
Como todas las disciplinas que hoy se consideran ciencias, la psicología tuvo su origen en la filosofía helénica. Recordemos que la filosofía surgió en Grecia como una oposición a las creencias populares que buscaban una explicación sobrenatural de los fenómenos recurriendo a los dioses y demonios.
Los antiguos filósofos griegos pretendieron dar una explicación naturalista a un gran número de cuestiones, incluyendo el comportamiento humano.
Aunque las ideas de Sócrates, Hipócrates, Platón y Aristóteles no tuvieron un impacto definitivo sobre el pensamiento mágico de su época, tienen el merito de inaugurar una visión naturalista para explicar el comportamiento. Veamos algunas de las aportaciones de estos sabios que vivieron cuatro siglos antes de Cristo.
Cuando Sócrates (469-399 AC.) afirmaba que su famosa frase “conócete a ti mismo” implica que: “Si yo se quien soy, sé también lo que debe hacer”, estaba dando un primer paso para ubicar dentro del hombre mismo la causa del comportamiento, ya no dentro de algún ente sobrenatural.

De igual manera Hipócrates (460-367 AC) da un paso más en la explicación de las causas del comportamiento de los individuos está determinando por la predominancia de uno de los cuatro humores básicos (sangre, bilis amarilla, bilis negra y flema) De acuerdo con Hipócrates se el humor predominante en el cuero de un individuo es la sangre , entonces tendrá un carácter sanguíneo y se caracterizar por ser cálido, afable, sensual y dado a los placeres; aquel en quien predominada la bilis amarilla era agresivo y excitable; un sujeto flemático sería de temperamento frío y calculador; mientras que el de bilis negra tendía a ser tranquilo, retraído y dado a la depresión.

Platón (427-347 AC) por su parte señaló que el alma es la guía de nuestro comportamiento y funciona como una carroza tirada por dos caballos. Uno blanco que tira hacia el bien y otro negro que tira hacia el mal, pero el nous (la razón) logra el equilibrio que regirá el comportamiento. Nuevamente observamos el afán de buscar la causa del comportamiento en el hombre mismo. Plantón estableció el dualismo al separar el mundo de las ideas del mundo material;


suponía que en el mundo de las ideas (Topus Uranos) los sabíamos todo pero al llegar aquí lo olvidamos, así que al conocer las cosas sólo las estamos reconociendo. Esto sentó las bases de la corriente filosófica conocida como racionalismo.


Aristóteles (384-322 AC) Reconocido como un gran genio y con frecuencia llamado el mayor filosofo de todos los tiempos. Su grandeza radica principalmente en la síntesis y sistematización del conocimiento de su época, con énfasis en los hechos empíricos. Se le considera el autor del primer sistema de la psicología. Al acentuar la importancia de la observación, clasifico el apetito, la razón, la voluntad, la percepción, etc. En su obra De sensu, Aristóteles realizó importantes aportaciones para la comprensión del proceso psicológico de la percepción. Al proponer dos teorías sobre los colores. En su tratado sobre la memoria propone el concepto Phantasia, el cual se refiere a un proceso que conduce a la representación de una imagen en la mente. Con la obra de Aristóteles se independizaron las ciencias naturales de la filosofía y dio origen al asociacionismo.

Las aportaciones de éstos y otros filósofos de esa época fueron el punto de partida de un estudio más sistemático de la conducta humana y perduraron por mucho tiempo gracias a las escuelas fundadas por Platón (La Academia) y por Aristóteles (El Liceo).

Después de la psicología aristotélica no hubo sistema de psicología original en el mundo antiguo.

Durante los primeros siglos de la era cristiana (siglo I a IX), el pensamiento se volcó hacia los aspectos religiosos y morales del hombre. Se promovió el monoteísmo en contra del politeísmo precedente, los teólogos y filósofos de este periodo se ocupaban principalmente de la naturaleza espiritual del alma de la relación entre el hombre y Dios.


La ausencia de una consideración sistemática de la psicología se mantiene durante la Edad Media, sin embargo con el nacimiento de la filosofía escolástica (siglo IX a XV), la mayoría de los filósofos de aquel tiempo se vuelven audazmente hacia la filosofía aristotélica. Así, el alma es estudiada en su naturaleza, pero con relación al cuerpo.

El desarrollo posterior de la psicología osciló entre tres ideas filosóficas básicas: el racionalismo, el asociacionismo y el constructivismo. Es importante


conocer estas ideas filosóficas puesto que nos permiten darle sentido a la gran cantidad de propuestas teóricas y a la enorme cantidad de descubrimientos que se hacen en la psicología. Además, nos proporciona una guía para organizar, en estas tres grandes categorías, la gran diversidad de conceptos e ideas que vamos a manejar en este curso.

La mayor parte de las teorías psicológicas actuales pueden ser incluidas dentro de estas tres ideas.

El racionalismo presupone que hemos nacido con el conocimiento que tenemos. El conocimiento deriva de la razón es una cualidad con la que nacemos. Cuando aprendemos sólo nos revelamos a nosotros mismos, por medio del razonamiento, el conocimiento que ya teníamos. Esta idea se remonta a Platón quien negara que lo que conocemos pueda derivarse de las impresiones sensoriales que son siempre cambiantes y movedizas, sino que depende de algo más estable que existe en la mente: las “esencias puras”, es decir, las representaciones únicas de los objetos siempre variables.
Cuando vemos varias figuras triangulares de diferentes tamaños, reconocemos a todas como triángulos en virtud de “algo más” que lo que hay en cada figura; ese “algo más” es “la idea” o “la esencia pura” de triangularidad que es estable en nuestra mente. Para Platón estas ideas o esencias puras son innatas y lo ilustra con el ejemplo de un joven esclavo que sin ninguna educación en las matemáticas, es inducido a “extraer” verdades matemáticas mediante un proceso de interrogatorio juicioso conocido como mayéutica; estas verdades no las aprendió en ningún momento, según Platón, habían estado desde siempre en la mente del esclavo.
René Descartes en el siglo XVII, al igual que Platón, consideraba que el verdadero conocimiento proviene de la aplicación del “pensamiento puro” a las esencias de la experiencia, sostenía que la razón es autosuficiente para llegar a la verdad. Para Descartes ninguna impresión sensorial concreta servía exactamente de ejemplo de los universales con que se relaciona, (lo que Platón llamó “esencias”) sino que eren “distorsiones” de éstos.
Los presupuestos del racionalismo han tenido gran influencia en algunas teorías contemporáneas de la psicología. Por ejemplo, el enfoque biológico que se describe en el siguiente aparato se suscribe plenamente al racionalismo. De este enfoque se derivaron las teorías del instinto y la etología. Por otro lado, el enfoque psicodinámico también tiene una base racionalista, dado que sus promotores le atribuyen carácter innato a la personalidad.

El asociacionismo afirma que el conocimiento sólo puede venir de la experiencia. Aristóteles introdujo la noción de “asociaciones mentales”. La idea


es muy simple: Las cosas que ocurren juntas o que van una detrás de otra en la naturaleza ocurrirán juntas o irán una detrás de otra en la mente. A partir de esta idea tan sencilla se generaron muchas teorías psicológicas, por ejemplo el empirista inglés Locke afirmó que el conocimiento tiene lugar a partir de las sensaciones sobre las que actúa una facultad de reflexión; argumentaba que los sentidos proporcionan ideas simples las cuales se convierten progresivamente en ideas complejas por medio de procesos de asociación.
Siguiendo a Locke, Hume destacó las asociaciones mentales basadas en la semejanza de objetos o acontecimientos, en su contigüidad en el espacio y en el tiempo o en su sucesión frecuente (causa y efecto). Los seguidores de estos empiristas redujeron todo el conocimiento a lazos asociativos. Estas ideas dieron lugar al pragmatismo que llegó a tener amplia repercusión en la psicología dado que era la "teoría del aprendizaje" más práctica de manejar para cubrir las necesidades de los educadores. El conductismo, fundado por Watson y propagado por Skinner, se apoya en estas ideas asociacionistas y planteó eludir los estados mentales, ahora se utilizarían las ideas asociacionistas para explicar las conductas observables.
A pesar del auge de las teorías psicológicas basadas en el asociacionismo, éste ha resultado ser demasiado simple para explicar satisfactoriamente la complejidad del conocimiento humano.

El constructivismo surge a partir de las ideas del filósofo alemán Emmanuel Kant quien sostuvo:
a)Que el mundo que conocemos es construido por la mente humana, y
b)Que toda construcción mental de la experiencia se organiza en esquemas.
Estas ideas fueron el punto de partida del movimiento de la Getstalt (el sujeto hace una reconstrucción activa de los datos sensoriales) y de la teoría de Barlett sobre los esquemas de la memoria (recordar es un proceso tanto reconstructivo como reproductivo). Las teorías de Piaget y Vygotsky se fundamentan también en esta aproximación filosófica.

A pesar de haber pasado tantos años desde que aparecieron las primeras ideas racionalistas (innatismo), asociacionistas (empíricas) y constructivitas no ha habido un acuerdo mayoritario entre los psicólogos acerca de dónde proviene y cómo se adquiere el conocimiento.

ENFOQUE CONSTRUCTIVISTA

Antes se habló ya de constructivismo, como una corriente filosófica que agrupa a varios enfoques teóricos de la psicología. Pero el constructivismo también constituye una corriente o paradigma teórica de la psicología, que ahora intentaremos caracterizar, pues sus desarrollos recientes caracterizan una forma peculiar de entender el psiquismo humano.
Se le atribuye a Kant (1783) el haber sembrado las ideas sobre el constructivismo. Su tesis “de que nuestra mente no crea las leyes partiendo de la naturaleza sino que las impone”8, es un ejemplo contundente de ello. Sin embargo, fueron los planteamientos de Giambattista Vico9, considerado por Glaserfeld (1996) como el primer genuino constructivista, los que metieron la pulla sobre el carácter de la verdad. En 1710 (algo más de medio siglo antes de la Crítica de Kant, 1781), Vico afirmaba que “Así como verdad de Dios es lo que Dios llega a conocer al crearlo y organizarlo, la verdad humana es lo que el hombre llega a conocer al construirlo, formándolo por sus acciones. Por eso la ciencia (scientia) es el conocimiento (cognitivo) de los orígenes, de las formas y la manera en que fueron hechas las cosas”


Pero según Rómulo Gallegos-Badillo (1996/2001), los orígenes de estas ideas se pueden rastrear hasta los presocráticos, concretamente en las ideas de Jenófanes (570-478 a.c.), que diserta la verdad, enlazándola con la fiabilidad humana; pero también en las Parménides ( ), Heráclito (540-475 a.c.) y varios de los sofistas10

Pero aún ubicándonos en el siglo XVIII, la posición de que sólo podemos llamar “verdad” a lo que corresponde a una realidad independiente y “objetiva” no se modificó después de los planteamientos de Vico y Kant. Es hasta el siglo XX, que fue Piaget con sus trabajos sobre la teoría psicogenética en los años cuarenta y cincuenta.11

Recordarás que Piaget, fue identificado como representante del enfoque cognoscitivista, y esto es correcto, pues se ocupó de explicar la naturaleza de las cogniciones, es decir de cómo conocemos. Pero también es igualmente cierto que fue uno de los que defendió las ideas de cuestionar la posibilidad de una verdad absoluta. Por esto último es que también es considerado un constructivista.

Para que quede más claro, “la idea original del constructivismo es que el conocimiento y el aprendizaje son en buena medida el resultado de una dinámica en que las aportaciones del sujeto al acto de conocer y aprender juegan un papel decisivo. El objeto es conocido mediante su puesta en relación con los marcos interpretativos que le aplica el sujeto, de manera que en el conocimiento no cuentan sólo las características del objeto, sino también y muy especialmente los significados que tienen su origen en los marcos de interpretación utilizados por el sujeto. El conocimiento y el aprendizaje no son pues nunca el resultado de una lectura directa de la experiencia, sino más bien el fruto de la actividad mental constructiva mediante la cual, y a través de la cual, las personas leemos e interpretamos la experiencia.” (Coll, 2001)12


Pero, a pesar de esta idea central del constructivismo, no podemos hablar de n solo planteamiento teórico, y en la actualidad encontraremos una variedad de posturas, distintas y hasta contradictorias. Cesar Coil (2001) distingue, al menos, tres tipos de constructivismo:

Constructivismo cognitivo. Es que nace con los planteamientos de Jean Piaget, que hunde sus raíces en la corriente cognoscitivista. En esta vertiente se concibe al pensamiento, el aprendizaje y en general los procesos psicológicos como fenómenos que tienen lugar en la mente de las personas. Así, en la mente de los alumnos se encuentran almacenadas sus representaciones —esquemas o modelos mentales- del mundo físico y social, de manera que el aprendizaje consiste fundamentalmente en relacionar las informaciones o experiencias nuevas con las representaciones ya existentes.
Constructivismo de orientación sociocultural. También llamado socio constructivismo o constructivismo social, está basado en los planteamientos de Lev S. Vigotsky. Se trata de un punto medio entre los dos extremos que representan la anterior postura que subraya el interior del ser humano, o sea su pensamiento como propiedad de un individuo, y la siguiente postura que enfatiza lo social, lo externo, o sea el lenguaje. Aquí se considera que el conocimiento es fruto tanto de las aportaciones de los individuos como de la dinámica de las relaciones sociales que establecen los miembros de un grupo. Así, un individuo puede participar en muchas comunidades distintas y desempeñar distintos papeles en ellas para la construcción del conocimiento. Las representaciones individuales y las actividades sociales se influyen mutuamente, en una relación dialéctica.
• Constructivismo vinculado al construccionismo social. También llamado socio construccionismo, está representado principalmente por Kenneth J. Gergen (1985, 1996) y Rom Harré (1986). Su idea fundamental es el rechazo a considerar los procesos mentales y la mente como propiedad de un individuo, como fenómenos que le ocurren a personas unitarias. Su naturaleza es social, y su localización está. en la interacción entre las personas, en las prácticas socioculturales, o sea, en el uso del lenguaje

Finalmente cabe señalar que el constructivismo no es una corriente totalmente acabada, y que actualmente existen psicólogos que trabajan en aclarar su significado Por lo que todavía está por verse lo que afirmarán.

Hasta aquí los enfoques contemporáneos de la psicología. Como pudimos ‘Ver esta disciplina ha venido nutriéndose de una gran diversidad de puntos de vista lo cual ahora puede permitirnos una mayor comprensión del psiquismo humano.

ENFOQUE SOCIAL DE LA LIBERACIÓN

La psicología –Social- de la Liberación tiene su origen en los trabajos de Ignacio Martín-Baró, jesuita español, que desarrolla entre los 70’s y los 80’s, antes que, en noviembre de 1989, fuera asesinado precisamente por las ideas que proponía, en las que demostraba su compromiso con las mayorías oprimidas.

Su trabajo se desarrolla en un contexto socio-histórico, local y amplio, muy peculiar. El local: El Salvador, país convulsionado por una guerra civil de más de una década. El amplio: Latino América, donde el pan de cada día era y ha sido la miseria, la injusticia, la marginación social, la de prelación del medio ambiente, la delincuencia, la criminalidad, la corrupción, la violación de los derechos humanos, la impunidad, etc. Se trata de países con sistemas capitalistas dependientes de países desarrollados particularmente de EU, y por lo tanto, con una minoritaria clase dominante, que ha impuesto en todos los ámbitos, incluida la psicología, una forma de actuar que preserva su status quo.

Martín-Baró insistió en que la psicología debía enfrentar los problemas locales, y que debía ser desarrollada desde las condiciones sociales y las aspiraciones históricas de las mayorías populares. En otras palabras, la psicología debería adoptar un papel desideologizador. Por ello cuestionó los principales modelos teóricos de la psicología (psicoanálisis, conductismo, humanismo y cognoscitivismo*), por considerarlos inadecuados para tratar las situaciones de violencia que prevalecían en Latinoamérica. La psicología servirá siempre y cuando no fuera una ciencia general o común para todos los lugares y pueblos, ya que debería adoptar una seria postura histórica y renunciar a la idolatría del occidente. El psicólogo debería conocer las necesidades, problemas y cuestiones culturales específicas de la sociedad con la que trabaja. Por eso un gran problema ha sido aplicar los conocimientos y herramientas psicológicas europeas y estadounidenses a un pueblo latinoamericano que no tiene la misma historia y raíces.


La posible razón de que los psicólogos latinoamericanos se hayan pertrechado en los modelos teóricos de la psicología, es querer imitar lo que los occidentales hicieron al seguir el camino de las ciencias naturales para constituirse como ciencia y, más importantemente, conseguir el reconocimiento social. Así, en Latinoamérica, a los enfoques psicoanalíticos y neuropsicológicos presentes por el culto rendido tradicionalmente a la psiquiatría, les sucedo una oleada de conductismo positivista; posteriormente los conductistas abandonaron el conductismo y se afiliaron al cognoscitivismo, ya sea por moda (impuesta por los centros académicos norteamericanos), o porque han sido obligados por las instituciones educativas en que hoy laboran.


Una crítica más específica es que, los “modelos tradicionales” tienden a individualizar (psicologización) los procesos que son, en esencia, psicosociales, y, por lo mismo, contribuyen a ocultar y justificar los intereses de la clase dominante, naturalizándolos, es decir, definiéndolos como rasgos de carácter propiedad de los individuos. Entonces la atención, al buscar la causa de los malestares que la psicología trata de combatir, desafortunadamente se ha estado desviando hacia la búsqueda de causas individuales y subjetivas (traumas infantiles, condicionamientos, herencia biológica, ideas irracionales, lesiones cerebrales, etc.)

Esta crítica fue posible desde que la Psicología de la Liberación se conformó a partir de dos grandes corrientes de pensamiento: el Materialismo Dialéctico, con su interés por analizar y transformar la organización social, y la Teología de la Liberación, con su replanteamiento de un especial interés de Dios por los oprimidos. También debe señalarse que sin ser estrictamente constructivitas, si comparten con ellos la aceptación de la relatividad de la verdad, por los que estas dos corrientes psicológicas nos son consideradas excluyentes.

Desde este punto de vista, el sistema social influye fuertemente en las cogniciones, motivaciones, afectos, y conductas de los individuos. De tal manera que el inconsciente tiene un papel mínimo para determinar nuestros actos y desarrollo psicológico. Y si bien las relaciones de producción pueden ser más importantes, se mantiene la confianza en la conciencia y voluntad del hombre: el hombre es capaz de construir mundos, no sólo a partir de pulsiones o condicionamientos, sino por firme convicción. Esto es porque el individuo depende claramente de las formas sociales, él no es absorbido por la sociedad. Individuo y sociedad forman una unidad dialéctica y se influyen mutuamente.

En cuanto a la misión de la psicología, se afirma que ésta no debe quedarse en el escritorio (mucho menos en el laboratorio), y el psicólogo no debe pretender pensar por la gente, ni transmitirle sus esquemas o resolverle sus problemas. En cambio, debe pensar y teorizar con ellos y desde ellos. Es la persona misma, la comunidad misma, en diálogo con el psicólogo, los que deben decidir y actuar para resolver sus problemas. A este fortalecimiento de la persona y la comunidad para estar en condiciones de afrontar sus propias vicisitudes, es a lo que se le conoce como empoderamiento (empowerment).

El empoderamiento ha sido promovido básicamente a través de la educación, ya sea formal o informalmente. El método que privilegiadamente se ha usado es la Investigación Acción Participativa, y la estrategia, el diálogo.


Algunos proponen que la educación para ser concientizadora y empoderadora, y que debería apuntar a:

Entrenar a las personas en el autocontrol y en el desarrollo de capacidades y hábitos que les permitan canalizar simbólica y constructivamente sus frustraciones.
Desarrollar una conciencia crítica frente a los modelos sociales y a las exigencias institucionalizadas de determinados roles sociales.
Promover actitudes de cooperación, y sobre todo, un estilo de vida austero y solidario, que refuerce el compartir y evitar el triunfo individualista.
Propiciar el nuevo ordenamiento de las relaciones sociales que devuelva el sentido a cada comportamiento y que obligue a cada actor a asumir la parte de responsabilidad social que le corresponde.


En este sentido, Martín-Baró proponía que las asociaciones profesionales debían promover redes de comunicación y cooperación, de investigación y de práctica profesional alrededor del mundo para que nuestra disciplina pudiese ser relevante y captar las necesidades de las mayorías.

Pero no sólo Martín-Baró es el que hizo posible esta perspectiva teórica. También otros pensadores latinoamericanos contribuyeron a dar cuerpo a la propuesta. Paulo Freire (1970,1971), pedagogo que, con influencias de la filosofía y la sociología propuso el concepto de concientización, en el contexto de un trabajo educativo de alfabetización concientizadora*.

Fals Borda (1985) también mantiene que el conocimiento práxico que se adquiere mediante la investigación participativa debe encaminarse hacia el logro de un poder popular, un poder que permita a los pueblos volverse protagonistas de su propia historia y realizar aquéllos cambios que hagan a las sociedades latinoamericanas más justas y humanas.6

También a Maritza Montero, se le puede ubicar en esta perspectiva. Según ella la imagen predominantemente negativa que el latinoamericano medio tiene de sí mismo respecto a otros pueblos denota la interiorización de la opresión en el propio espíritu, semillero propicio al fatalismo conformista, tan conveniente para el orden establecido7.

Finalmente, es importante señalar, que el desarrollo de esta perspectiva no se ha detenido, y actualmente parece muy prolífica, no sólo en Latinoamérica, sino en muchos otros países (Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, España, y varios países de África), a donde quiera que los psicólogos han adquirido una conciencia social y se han dedicado a trabajar con los sectores marginados de su sociedad y que se han servido, para ello, del método de Investigación Acción Participativa. A tal grado está cobrando legitimidad que ha dado lugar al surgimiento de una nueva área en la psicología: la Psicología Social Comunitaria, la que a su vez ha permitido un encuentro muy productivo entre la Psicología Social y la Psicología Ambiental.

ENFOQUE TRANSPERSONAL

José Tito G. Pérez Coraza 1
El pensamiento oriental que se ha considerado como el alimentador del enfoque transpersonal, aparece en occidente en el siglo XIX con Arthur Schopenhauer y posteriormente en el siglo XX los ingleses tradujeron una gran cantidad de textos sagrados del hinduismo teniendo de esta forma alternativas ideológicas a su pensamiento. Esto además promovió incursiones de europeos
hacia lugares como el Tibet. , ~
Esta corriente de pensamiento influyó en el psiquiatra y psicoanalista suizo Carl Jung y el pragmatista William James, quienes examinaron en sus textos las variedades de la experiencia religiosa y el trasfondo psicológico de la religión, que son en gran medida del dominio del enfoque transpersonal. También fueron influidos Antony Sutich y Abraham Maslow quienes advirtieron que nuestro crecimiento puede ir mas allá de la autorrealización, para perderse en lo ilimitado e insospechado del desarrollo transpersonal.. .
En nuestro país, se tuvo acceso al pensamiento oriental a través de diversos libros: Místicos y Magos del Tibet de Alejandra David Neel, El Retorno de los Brujos de Pawels y Bergier, La Conspiración de Acuario de Marilyn Ferguson, Místicos, Ascetas y Santos de la India de John Campbell aman, entre otros.
Por otro lado, Eric Fromm, uno de los representantes del enfoque psicodinámico organizó en Cuernavaca un seminario sobre Budismo Zen y Krisnamurti vino a México a impartir conferencias.
Todas estas influencias del pensamiento oriental en la filosofía y la psicología occidental fueron dando forma al enfoque transpersonal.


En este enfoque se busca un crecimiento que, además de abordar los aspectos de la madurez personal, se proyecta hacia el máximo de la plenitud humana, a través la ampliación de la conciencia.

Esta perspectiva ha sido desarrollada principalmente por Ken Wilber a partir de las ideas del enfoque Humanista-Existencial. Este autor propone una síntesis psicológica-teológica que incluye el pensamiento oriental y el pensamiento occidental.

Wilber afirma que la conciencia abarca un amplio espectro que incluye lo prepersonal, lo personal y lo transpersonal; sin embargo, la mayoría de los enfoques psicológicos han puesto atención sólo un aspecto, afirmando que es el único que existe. El enfoque transpersonal pretende una visión integral del fenómeno psicológico.

En el campo de la psicoterapia, de acuerdo a las observaciones de Ken Wilber, los diferentes enfoques abordan un determinado nivel de conciencia. Las terapias de apoyo nos ayudan a conocer y reconocer la sombra, esto es, el lado oscuro de nuestra personalidad. Nuestros defectos, zonas erróneas, mecanismos de defensa exagerados, etcétera, pertenecen a esa sombra.
El psicoanálisis arroja luz en las profundidades del inconsciente. Y amplia el campo de la conciencia hasta el mundo agitado y desconocido de nuestras experiencias reprimidas.

Las terapias corporales nos llevan, al logro de la conciencia corporal. Lo cual no es simple percepción de nuestras sensaciones u estados psicosomáticos, sino la integración que nos lleva a experimentar que somos un cuerpo auto conciente. En esta línea se despierta también la conciencia de pertenencia y solidaridades sociales.
El nivel de las terapias transpersonales corresponde a lo cósmico. Nos damos cuenta que no somos un ego separado y aislado. Por el contrario, advertimos que formamos parte de la totalidad universal.

En efecto, la terapia transpersonal busca los “estados alterados de la conciencia”, utilizando técnicas como la respiración, la música, juegos proyectivos y por regla general, echa mano de la meditación, igual que en las grandes tradiciones espirituales.

El efecto moral de esta alteración de la conciencia, es el paso a la experiencia transpersonal. Esta puede producir un conflicto de paradigmas. Quien lo experimental siente que el universo es unitario y de ningún modo mecánico, según el paradigma newtoniano.
La psicoterapia transpersonal no sólo pretende que las personas alcancen ese tipo de experiencias –indicadoras de un desarrollo superior de la


autorrealización personal- sino que busca también ese tipo de conciencia en la que el individuo se siente unido a la totalidad del universo. Más allá del razonamiento y del análisis intelectual, el ser humano descubre el mundo del inconsciente colectivo, advierte su vinculación con la historia del hombre, la pasada y la actual.

Con la aplicación de las técnicas transpersonales se desarrollan nuevas actitudes y sentimientos que solidarizan al individuo con el futuro de todos los hombres, a los que contempla como hermanos e, incluso, como una prolongación de si mismos; al compadecerse de ellos, al ayudarlos y amarlos, no siente que se entrega a seres ajenos y, mucho menos, separados del propio yo. Benson señala que después del trance de la meditación estamos más receptivos a la información y con mayores posibilidades de cambios conductuales y emocionales.

Finalmente para terminar este somero bosquejo del enfoque transpersonal, señalaremos que uno de sus supuestos básicos afirma que la realidad está compuesta por diversos niveles de existencia –niveles de ser y de conocimiento los cuales abarcan desde la materia, hasta el cuerpo, la mente, el alma y el espíritu. Como puede verse en la figura de abajo, cada nivel del ser incluye las propiedades del nivel anterior y añade otras nuevas a modo de círculos o esferas concéntricas.

Esta representación conocida cono El Gran Nido del Ser no debe concebirse como estructuras inmutables o moldes permanentes determinados de antemano, sino como potencialidades evolutivas. Los niveles inferiores ya existen en el mundo manifiesto, pero las estructuras superiores no se han manifestado en la mayoría de las personas.


Estos y otros aspectos de la corriente transpersonal, de un modo u otro, sostienen la búsqueda de una perspectiva más amplia del concepto de conciencia y de desarrollos superiores del ser humanos conectándose con los ámbitos de la medicina, economía, antropología, ecología, espiritualidad, educación y política.
Siendo esto con el fin de tener una mejor sociedad que no termine por autodestruirse en esta carrera loca que ha emprendido con mucha tecnología, pero, con escaso humanismo.

ENFOQUE SISTÉMICO

Cuauhtémoc Chávez Zavaleta y . José Tito G. Pérez Coraza
Paralelamente a Los trabajos de Norbet Wiener y Claude Shannon (1948), en Cibernética, Ludwing Van Bertalanfy (1945)4 planteó una teoría integradora, como la que evidentemente hacia falta en el campo de las ciencias, a la que llamó Teoría General de Sistemas (TGS). Todo ello nutrido por los avances en otras áreas particulares del conocimiento como la Física, Biología y Matemáticas, dio pauta para que se comenzaran a desarrollar nuevas perspectivas en psicología, que entran por la puerta de su área clínica (Hoffman, Lynn, 1981/1987)5.
Desde la óptica de la TGS, la familia podría ser vista como un sistema, esto es, como una totalidad que se autorregula y se mantiene en constante interacción con su medio, en un circuito de influencia recíproca. Este proceso apunta a alcanzar un equilibrio dinámico entre dos tendencias: la estabilidad (homeostasis), que permite la permanencia del sistema; y el cambio (capacidad de transformación), que posibilita los ajustes necesarios para responder a las modificaciones internas y a las externas. Así vista la familia, se sentaban las bases para intentar trabajo terapéutico, ya no con individuos, como era la tradición, sino con familias completas.
Paradójicamente estos esfuerzos no son iniciados por psicólogos. En la década de los 50s, el antropólogo Grgory Bateson, junto con un grupo de científicos iniciaron un importante proyecto cuyo objetivo era estudiar la comunicación que se propiciaba entre los miembros de familias con pacientes esquizofrénicos. Su conclusión, en términos generales, fue que en la recuperación de dichos pacientes era determinante la participación de la familia, como grupo en el cual el sujeto había pasado gran parte de su vida. Según esto, la patología no residía (como antes se suponía) en el individuo, sino que se localizaba en la forma en que la familia se relacionaba entre sí (Hoffman, 1981/1987).
De tal manera, que si era cierto que existía una enfermedad, no era el "individuo enfermo", si no era la "familia enferma". El "paciente", no era más que un síntoma del sistema familiar enfermo. En otras palabras, se encontró que los problemas radicaban en unas pautas de comunicación problemáticas.
Unas de tales formas problemáticas de comunicación son las llamadas paradojas que son comunicaciones que posee, al mismo tiempo, dos mensajes contradictorios. Por ejemplo, si alguien nos dice 'jSé espontáneo!', resulta que si obedecemos la orden ya no estamos siendo espontáneos, y en realidad la estamos desobedeciendo puesto que seguimos un mandato. Estar atrapado en mensajes como estos, en que haga 10 que uno haga pierde, se le llamo doble vínculo, y se le identificó como un determinante importante de la esquizofrenia. Pero los problemas de un sistema familiar, empezaban cuando la familia se negaba a cambiar; cuando dominaba la tendencia a la estabilidad. Por lo que el terapeuta debía intervenir sobre el sistema para evitar estos estancamientos.
Así pues, la familia como sistema, implica considerar a sus miembros como elementos de un circuito de interacción y sin poder unidireccional alguno sobre el conjunto. Es decir, que la conducta de un miembro de la familia influye inevitablemente sobre la de otros miembros y éste a su vez es influido por la conducta de los demás. De la misma manera, cuando el terapeuta interviene sobre el sistema, influye en el, pero también es influido por las comunicaciones que provienen del mismo sistema.
Finalmente, vale la pena señalar que el enfoque sistémico engloba a varios modelos de psicoterapia, que comparten los principios generales anteriores; pero


algunos modelos ponen más énfasis en las pautas de comunicación, otros en la manera en que está estructurada la familia, otros resaltan las tareas que deben realizar los miembros de la familia, o en el tipo de mensajes que maneja el terapeuta en su intervención. Así, actualmente pueden distinguirse los siguientes modelos, Terapia Centrada en Pautas Conductuales (Escuela de Palo Alto, California: Paul Watzlawick, John Weakland, Richard Fisch, Nardone,), Terapia Centrada en Pautas de Significado (Escuela de Milán, Italia: Mara Selvini Palazzoli, Boscoso, Cecchini), Terapia Estructural (Salvador Minuchin), Terapia Centrada en Soluciones (Ohalon, Steve de Shazer), Escuela Estratégica (Jay Haley, Madannes), Escuela de Narrativa (Michel White.y David Epston), Terapia en Equipo de Reflexión
(Tom Andersen) y Terapia con Enfoque Colaborativo (Harlene Anderson).

ENFOQUE HUMANISTA EXISTENCIAL

El enfoque psicodinámico y conductista parecen totalmente opuestos y, sin embargo, comparten un punto de vista: los factores internos o ambientales, respectivamente, controlan la conducta humana. Desde ambas perspectivas la libertad humana no pasa de ser una mera ilusión. No todos los psicólogos aceptan tal visión de la condición humana. Algunos afirman que el hombre es algo más que una marioneta manipulada por la psicodinámica interna o por el medio externo; señalan, además, que esas concepciones nos privan de la dignidad humana. Prefieren considerar al hombre como un ser libre, creativo e intrínsecamente bueno, que lucha por alcanzar la plenitud de su ser. Así, pues, el enfoque humanista-existencial muestra un fuerte contraste con las tendencias psicodinamicas y conductista que han predominado en la psicología estadounidense.
Las raíces históricas de este movimiento las encontramos en varios sistemas filosóficos y religiosos que han puesto de relieve la dignidad, la bondad natural y la libertad del hombre. La introducción de esta tendencia en la psicología se debe en parte a tales ideas, y en parte es una reacción a la visión tan poco halagadora que ofrecen el psicoanálisis y el conductismo.
Entre las teorías de mayor trascendencia se cuentan la de Carl Rogers (1951, 1981) y Abraham Maslow (1970, 1971). Una premisa fundamental de ambos es que en todo hombre existe una fuerza activa que los impulsa al crecimiento y la autorrealización. Su naturaleza positiva se manifiesta cuando la personalidad se desenvuelve en un clima propicio para esas fuerzas creativas. Por otra parte, la miseria y la patología humanas tienden a ocurrir en medios ambientales que frustran el impulso del individuo hacia la realización de sí mismo.
Estrechamente relacionada con el movimiento humanista está el enfoque existencial, que se difundió en Europa gracias a los trabajos de psicólogos y filósofos como Jean Paul Sartre (1956), Rollo May (1961) y R.D. Laing (1967) quienes hacen hincapié en la autodeterminación, la elección y la responsabilidad personal de no dejarse dominar por las fuerzas ambientales. "Somos decisiones personales" afirman los existencialistas. La existencia y su significado están en nuestras manos, pues toca al hombre decidir sus actitudes y actos.
Los partidarios de esta corriente señalan que la psicología científica ha errado el camino al ocuparse exclusivamente de la conducta observable y prescindir de la vida interior del sujeto. Para ellos, las experiencias internas y nuestra búsqueda del sentido de la vida constituyen el centro de nuestro estar-en-el- mundo, y han de ser los temas centrales de la psicología. Por tanto, consideran válida la introspección como una fuente imprescindible de información psicológica.

ENFOQUE CONGNOSCITIVO

Al reflexionar sobre la naturaleza humana, no podemos dejar de concentramos en la maravillosa capacidad de pensar, imaginar, juzgar, prever, reflexionar sobre uno mismo y el mundo, crear y decidir. En una palabra, vienen a nuestra mente los procesos cognoscitivos "superiores".
.El adjetivo cognoscitivo proviene del verbo latino cogito, que significa "pensar". El enfoque cognoscitivo pone de relieve la forma en que el hombre "procesa" en su mente la información, la evalúa y reacciona en función de sus planes y previsiones. Considera al hombre como un resolvedor activo y racional de problemas, que crea, interpreta y transforma muchos de los estímulos a los que responde. Las teorías psicodinamicas, dan prioridad a la función de las fuerzas inconscientes e irracionales; en cambio, esta perspectiva ve en el ser humano un sistema procesador de información, cuyos actos son gobernados por el pensamiento racional y la planeación.
El psicólogo suizo Jean Piaget (1896-1980), quien fuera profesor de la cátedra "Psicología del Niño" en la Sorbona, estudió por más de 50 años cómo los niños piensan, razonan y resuelven problemas. Sus métodos fundamentales fueron la observación naturalista y la inferencia. Según Piaget, el niño no se conforma con recibir impresiones sino que construye activamente su psiquismo.
Este enfoque concede al hombre un papel más activo en la modulación de su conducta, que los enfoques biológico y psicodinámico. El hombre es quien domina sus experiencias y no a la inversa. No es un mero "reactor" pasivo ante el ambiente, sino que 10 estructura y 10 interpreta. En parte la realidad en que vivimos es fruto de nuestra creación.
Derivada de este enfoque la teoría del procesamiento humano de la información (PHI) considera a la computadora como modelo del cerebro humano, se afirma que contamos con un "hardware" (estructuras cerebrales) y un "software" (estrategias aprendidas para procesar la información). Al igual que la máquina procesamos la entrada de la información (input), ejecutamos ciertas operaciones y generamos una respuesta (output).

ENFOQUE PSICODINÁMICO

En su búsqueda histórica por penetrar en el tenebroso mundo de sus motivos más recónditos, la humanidad había aceptado la noción tradicional de que el ser humano es una criatura gobernada por la razón y el pensamiento consiente. Pero a fines del siglo XlX, cuando todavía persistían las consecuencias del impacto producido por la teoría de Darwin, Sigmund Freud (1859-1939), medico vienes, lanzo el segundo golpe señalado que ser humano no es una criatura racional ni civilizada.
Cuando estudiaba medicina en Viena, durante los primaros años de la década de 1880, Freís empezó a interesarse en el tratamiento de la histeria, trastorno caracterizado por síntomas físicos como ceguera, dolor o parálisis que aparentemente no se debían a causa orgánica. Descubrió que muchas de las enfermedades nerviosas de sus pacientes eran de origen psicológico más que fisiológico. Se convenció de que los deseos y conflicto inconscientes son la causa de tales síntomas; sus descubrimientos clínicos lo llevaron a formular una teoría muy completa sobre la vida mental, la cual se apartaba radicalmente de las ideas de los psicólogos estadounidenses.
Freíd trabajo con pacientes histéricos, utilizando primero la hipnosis y luego un método ideado por el, la asociación libre. Se le pide al paciente decir cualquier cosa que le venga a la mente y dejar que una asociación conduzca libremente a otra aun cuando el orden de estas no parezca lógico ni racional. Freíd se sorprendió por que sus pacientes (mujeres en su mayoría) comunicaban experiencias y deseos sexuales de su niñez, extremadamente dolorosos, olvidados durante largo tiempo. Después de expresarlos sus síntomas disminuían considerablemente. Pero muchas de esas experiencias resultaron ser ficticias. ¿Por qué el hecho de “revivir” acontecimientos que en realidad nunca había


tenido lugar atenuaba los síntomas de la histeria? Freud propuso que la existencia de un impulso sexual potente e insatisfecho los hacia crear esas fantasías.
Freud descubrió que a si mismo en los sueños y en las equivocaciones al hablar (lapsus linguae) se manifestaban contenidos sexuales. Estas observaciones, aunadas a un intenso periodo de autoanalizas, lo llevo a formular la hipótesis de que gran parte de la conducta humana esta influida por fuerzas cuya existencia pasa inadvertida al sujeto. Concedió gran importancia al impulso sexual innato y estaba convencido de que la personalidad del adulto recibe un fuerte influjo de la manera de afrontar esos instintos conforme vamos creciendo. Pensaba que, como se prohíben los deseos y las necesidades sexuales desde los primeros años de vida, el sujeto acaba por reprimirlos relegándolos a la parte inconsciente de la mente, en la que permanecen como fuentes de energía, luchando constantemente por salir a la superficie. La personalidad constituye intrincadas defensas para mantener bajo control los instintos prohibidos.
Sigmund Freud creo una nueva forma de estudiar la conducta humana. Antes de su época de psicología se centraba en la conciencia, es decir, en los pensamientos y sentimientos de los cuales estamos consientes, sus ideas sentaron las bases del psicoanálisis, termino que abarca su teoría de la personalidad y el método terapéutico que desarrollo.
Toda conducta, tanto la normal como la anormal, es un reflejo de incesante lucha interior entre el instinto y las defensas. Cuando estas son suficientemente fuertes, los instintos se manifiestan en formas disfrazadas y socialmente aceptables (proceso que recibe el nombre de sublimación). Sobreviven los síntomas patológicos si las defensas no logran controlar los instintos o si obligan al individuo a observar una conducta anormal a fin de controlarlos.
El teórico de esta corriente afirma que la conducta humana es, en gran medida, resultado de complejas fuerzas psíquicas internas, y concede mucha importancia a la influencia de conflictos pasados sobre la actividad actual. Conviene señalar que en la teoría de Freud ocupa un lugar destacado el aspecto biológico. Profundamente influido por Darwin, consideraba al hombre como un animal cuya naturaleza inherentemente destructiva es mantenida bajo control por las restricciones que le impone la sociedad.
Las teorías de Freud dieron origen a otras teorías psicodinamicas, algunas en oposición ostensible con el, pero presidiendo de sus particularidades, todas ellas coinciden en un rasgo esencial: la dinámica interna es un elemento importantísimo para explicar la conducta.


Ampliada y revisada por los colegas y sucesores de Freud, esta teoría sentó las bases del estudio de la personalidad y de lo trastornos psicológicos, y sigue ejerciendo gran influencia todavía.

ENFOQUE BIOLÓGICO

El género humano existe hoy gracias a la capacidad de nuestros antepasados para adaptarse, tanto en lo biológico como en lo actual, a un ambiente cambiante y frecuentemente hostil. Esas adaptaciones han hecho del ser humano el organismo más complejo e intrincado de la tierra. Para comprender nuestro comportamiento hemos de tener en cuenta los factores biológicos que lo afectan.

En 1859 la publicación del libro de Charles Darwin, El Origen de las especies, produjo una revolución en la concepción que el hombre tenia de si mismo, dicha revolución en la concepción que el hombre tenia de si mismo, dicha revolución perdura hasta nuestros días. Darwin no fue el primero en señalar la posibilidad de la evolución de los animales, pero su teoría es la más plausible, la más amplia y la mejor documentada. Para muchos, esa teoría negaba la naturaleza sobrenatural del hombre propuesta por los dogmas cristianos. Darwin afirmo que cada nueva especie evoluciona con el tiempo en respuesta a las condiciones ambientales, en virtud de un proceso denominado selección natural o “supervivencia del más apto”. Ello significa que todo rasgo heredable, sea físico o conductual, será conservado en la especie si aumenta la probabilidad de la supervivencia.
Darwin no dijo que somos descendientes directos de los simios actuales:
Creía que tanto el ser humano como el simio proceden de un ancestro común que vivió en una época muy remota.
La importancia de la evolución va más allá del desarrollo físico. En efecto, de la biología de un organismo dependen sus capacidades conductuales, y de estas dependen a la vez sus supervivencia. Conviene subrayar un hecho importantísimo: en la historia de la especie humana lo que evoluciono fue una conducta eficaz al igual que un cuerpo cambiante. El antropólogo Sherwood Washburn sostiene que, cuando la vegetación empezó a escasear en algunas partes del mundo y, los simios tuvieron que abandonar los árboles y cazar para conseguir carne, la supervivencia fue mas fácil para las criaturas que desarrollaron la locomoción bipedal (capacidad para caminar con dos piernas). El bipedalismo libera las manos y con ello propicia la invención y empleo de mejores armas; la caza, a su vez favorece la organización social. El uso de instrumentos y la locomoción bipedal impusieron otras presiones de selección en varias partes del cuerpo (dientes manos y pelvis), pero fue el cerebro el que sufrió la mayor tensión. Gracias a este tipo de tensiones cerebrales se desarrollaron las facultades cerebrales de importancia esencial para la naciente forma de vida humana: atención, memoria, lenguaje, pensamiento.


En el lapso comprendido entre criaturas semejantes al hombre tan antiguas como Australopitecus (que vivió hace dos millones de años) y el hombre de Neandertal (de hace 75 000 años), el encéfalo triplico su tamaño y crecieron muchísimo los tejidos del cerebro, sede de los procesos mentales superiores. El desarrollo del encéfalo contribuyo al desarrollo de la cultura humana y a la inversa.
El enfoque biológico no solo se ocupa de los factores genéticos y evolutivos, sino que también examina el nexo tan íntimo existente entre su comportamiento y sistema nervioso. Dados los adelantos técnicos de los últimos años, por ejemplo el descubrimiento del genoma humano, tenemos buenas razones para suponer que estamos en vísperas de conocimientos revolucionarios acerca de la dimensión biológica de nuestra naturaleza y sus efectos sobre la conducta.

viernes, 10 de septiembre de 2010

ENFOQUE CONDUCTISTA

 El enfoque conductista se concentra en el influjo del ambiente externo que modela y estimula nuestra conducta. Niega que el hombre escoja libremente su forma de actuar .Los factores que regulan la conducta humana residirán en el medio externo y no en el interior del individuo.

El comportamiento depende de dos elementos que obran simultáneamente: La forma en que fueron condicionados por las experiencias de su vida anterior y los estímulos del ambiente inmediato. Según John lock, uno de los primeros empiristas la mente del hombre es  en el comienzo una hoja en blanco  sobre la cual nuestra experiencia  va escribiendo.
Uno de los mas destacados exponentes mas destacados del movimiento fue John b. Watson quien afirmo que el objetó propio de la psicología lo constituían las conductas observables y no la conciencia inobservable


 •Comparo al hombre con una maquina que reacciona mediante impulsos.


 •El ser humano era para el producto de los factores condicionantes de su vida, de modo que su conducta podía  controlarse por completo mediante la manipulación  del medio

  
 •Otra figura destacada de esta tendencia es B.F.Skiner quien en su opinión, las creencias erróneas de que la conducta humana proviene de factores internos del individuo servirán para distraer la atención de sus causas verdaderas, las cuales se encuentran en el mundo exterior.

  • A la concepción estricta de Watson y Skiner se le ha llamado conductismo radical. En el comportamiento influyen mucho los recuerdos del pasado y las previs}iones sobre los resultados que se presentaran si observamos determinado comportamiento.

 •Mas aun. Podemos aprender nuevas conductas en forma vicaria, es decir, observando las acciones de otros y almacenando esa información en la memoria.Este proceso se le llama modelamiento



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